martes, 16 de mayo de 2017

...

Está oscuro. Hay tanto ruido. Hay tanto que no importa. Hay tan poco para mí. Tengo sed. No tengo nada. Una voz entrecortada en mi cabeza. El teléfono. El espejo. El café frío. Tengo que correr y no puedo. Tengo que callar y debo hablar. Estoy cansada de no ser. Tengo que decir adiós y debo saludar. Tengo que seguir el instinto y debo suplicarle que me espere. 

El deber es una maleta que quisiera dejar, aunque no sé si de verdad. Tengo que tocar una guitarra, los 3 acordes de siempre por horas. Tengo que quedarme suspendida y alargar este suspiro. Estoy cansada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Hablemos... ¿Qué opinas? ¿Tienes algo para contarme?